RUTAS REALIZADAS

MEANDROS DEL RÍO ALAGON. PR SA-23

SIERRA DE FRANCIA.

En esta ocasión nos dirigimos a tierras salmantinas, concretamente a la Sierra de Francia, realizaremos una travesía que nos llevará desde el pueblo salmantino de Sotoserrano hasta el pueblo extremeño de Riomalo de Abajo, donde dimos cuenta de un apetitoso cabrito hurdano.

Partimos de de Sotoserrano caminando sobre el GR-10 en sentido descendente hacia el río Alagón que cruzamos por el puente de la carretera. Así llegamos al puente sobre el río Cuerpo de Hombre, que cruza este GR, unos metros antes de desembocar en el río Alagón. Se cruza el puente y se toma un camino que sale hacia la derecha y que discurre por la margen izquierda del río Alagón.

 

La pista circula al lado del río un par de kilómetros, entre chaparros, jaras y encinas. A partir del km 2 la ruta gira a la izquierda y comienza a ascender, haciéndose cada vez más irregular. Allí se obtienen bellas vistas del Alagón, que penetra entre la sierra del castillo y el cerro de los pinares de El Pardo.

El camino desciende para cruzar por un puente las cristalinas aguas del arroyo Servón, que igualmente desemboca en el Alagón. Al penetrar en el Pardo el paisaje cambia, las encinas y alcornoques dejan su lugar a eucaliptos, pinos y algunas madroñeras. El matorral se hace más denso antes de ascender hasta el imaginario mirador de los meandros del río Alagón (592 m; 7Km).

Después de una obligada parada para admirar las impresionantes vistas de los meandros, el PR continúa descendiendo a media ladera por la cara Oeste de El Pardo, sin perder de vista el río hasta un cruce de pistas. El descenso sigue por la primera de la derecha. Hay que estar atentos para tomar el camino de descenso a la derecha puesto que las señales brillan por su ausencia en este tramo del recorrido.

 El camino pierde altura y casi se está al nivel del río. Poco después, el sendero alcanza las ruinas de la antigua aldea de Cabaloria. Salimos a la carretera y giramos a nuestra izquierda para dirigirnos al límite provincial y poco después llegamos a Riomalo de Abajo donde nos espera una apetitosa comida.

Después de la comida y para hacer la digestión nos dirigimos al mirador de El Melero para ver los meandros desde una perspectiva realmente espectacular.